Compra de empresas
Compra de empresas, divisiones o líneas de actividad
La compra de una empresa es un proceso cuyas convicciones deben de estar sólidamente asentadas en la empresa compradora, en caso contrario la culminación con éxito del proceso de compra, salvo en los casos en los que la empresa se dirige a la adquisición de una empresa concreta por unos motivos concretos, suele ser improbable.
De ahí que ALBIA fomente entre sus clientes el diseño de una Estrategia de Desarrollo Corporativo antes de iniciar un proceso de búsqueda de targets para una potencial adquisición de forma que la empresa adquirente tenga claro qué quiere comprar, con qué producto o qué productos, que tecnología y con qué mercados actuales y potenciales.
Una vez definidos estos objetivos se realiza un screening de los distintos mercados objetivos para la empresa, apoyados en la red internacional de boutiques de IMAP, identificándose los potenciales targets y priorizándolos en función de la estrategia y el grado de aportación de éstos a la misma.
Una vez priorizados los candidatos, o bien cuando el mandato de compra es para una empresa en concreto, se inicia la fase de toma de contacto, en la que ALBIA ejerce de interlocutor, protegiendo la identidad del potencial comprador de la empresa, e inicia conversaciones tendentes a evaluar el interés de la otra parte y a transmitir las ventajas que la posible operación pudiera tener para el target y sus accionistas.
Si de las conversaciones previas se dedujese que resulta interesante iniciar la fase de análisis, se firmaría un acuerdo de confidencialidad entre las partes (NDA). En esta fase, ALBIA profundiza en el conocimiento de la empresa objetivo, analizando el producto de la empresa, su mercado, su competencia y posicionamiento competitivo, la tecnología, organización, principales procesos de la empresa, producción y la parte financiera. Todo este análisis se comparte y contrasta con el cliente, con el que se elabora un plan para la empresa objetivo del que derivará la valoración para la compra de la misma.
La siguiente etapa consiste en la definición de la estrategia de oferta en función del análisis realizado, de la situación de la empresa, de la situación de sus accionistas y de otros condicionantes internos y externos, que se concreta en la redacción de una oferta no vinculante.
La emisión de la oferta supone el inicio del proceso negociador en cuanto a los principales parámetros de la posible compra de la empresa, se negociarán precio, condiciones, garantías, confidencialidad, no competencia, etc. Normalmente este es un proceso largo, psicológicamente agotador y que requiere la dedicación de tiempo, esfuerzo y desgaste, por lo que ALBIA trata de asumir la mayor parte del esfuerzo, manteniendo a su cliente libre de las consecuencias del mismo y centrado en la gestión de su negocio actual. Caso de llegar a un acuerdo en la oferta no vinculante, una vez firmada ésta por ambas partes se iniciaría la fase de Due Diligence.
En la fase de Due Diligence, deben intervenir distintos profesionales (auditores, fiscalistas, laboralistas, mercantilistas, etc.) que ALBIA coordina y a los que dirige en aquellos puntos de la empresa identificados como relevantes en los análisis previos.
Finalizada la Due Diligence se inicia la última fase de la compra de empresas con la negociación de las conclusiones de la mencionada auditoría y la redacción de toda la documentación legal necesaria (contratos, pactos de accionistas, side letters, etc.) en la que ALBIA colabora estrechamente con los abogados del cliente, culminándose esta fase con la elevación a público del contrato de compraventa acordado por las partes.