Queridos socios, compañeros, amigos,
Hace solo tres semanas estábamos cancelando nuestra conferencia en Denver, aunque nadie hablaba de recesión. Esta mañana mi móvil me recordó mi vuelo cancelado. La cuestión ya no es si habrá una recesión mundial, sino si habrá una depresión prolongada.
Empecé a escribir sobre esto durante el fin de semana, pero, desafortunadamente, Zagreb sufrió su mayor terremoto en 140 años, enviando a la población a congregarse en las inusuales frías calles.
Parecía como si Dios nos estuviera diciendo: “Olvidaos del aislamiento, salir a la calle y relacionaos/mezclaos…” Así que, tras varios días evaluando los daños causados, tratando con los inspectores, ayudando a los vecinos, agradeciendo a las personas que nos deseaban lo mejor y nervios por las posibles réplicas, retomo las potenciales réplicas de esta “crisis”.
Estoy seguro de que muchos de vosotros habréis leído numerosos mensajes y evaluaciones de CEOs, bancos, consultoras, centros de estudio, etc. La mayoría proporcionan análisis reflexivos, pero otros muchos parecen estar en la categoría de “tenemos que decir algo”.
No sirve de nada mirar los indicadores financieros . No han tenido la oportunidad ni siquiera de ponerse al día con la velocidad global de la desaceleración económica. Cada día las estimaciones son peores, como si Goldman Sachs y Morgan Stanley estuvieran tratando de superarse entre ellas sobre lo desastrosa que va a ser. Poco después de leer esto, se anunciarán en EE.UU las solicitudes iniciales de desempleo (Jueves, 8:30 am EST). Se estima un rango entre 1-2 millones. Los mercados en desarrollo están siendo diezmados por las caídas en los precios de los productos y restricciones de liquidez.
¿Puede el mundo darle la vuelta a esta situación?
El único ejemplo que tenemos es el caso de China. Ellos han podido controlar esta crisis únicamente mediante un completo y drástico aislamiento, amplio testeo y ahora, y por ahora, supervisando a la población que vuelve a sus puestos de trabajo. La recuperación en China será un proceso lento, no un milagro con forma de V.
Y, desafortunadamente, o no, la mayoría de las economías occidentales no disponen de ese nivel de control social.
¿Funcionará la intervención del gobierno?
Los Bancos Centrales han aportado el mayor estimulo monetario en el corto plazo nunca visto. El Fed está en modo QE infinito y los demás bancos le siguen. Ahora, mientras escribo esto, EE.UU ha aprobado un estimulo fiscal de 2 billones de dólares, y los mercados bursátiles se han vuelto locos. Pero, considerar que cada billón representa un 5% del PIB. Esto significa que, además del déficit presupuestario actual del 5%, y con unos ingresos fiscales reducidos, estamos hablando de un déficit presupuestario del 20% del PIB en EE.UU para este año.
Este es nivel más alto desde la Segunda Guerra Mundial y el doble que en el 2009. Todos los países están tratando de proporcionar el mayor estimulo posible. Estamos ante una situación de incredulidad, cualquier tipo de predicción en esta etapa sobre el momento de la recuperación o como se verá el mercado en el otro extremo es un juego de adivinanzas. Lo que deberíamos hacer es seguir los datos día a día y mirar las tendencias que podrán desarrollarse en las próximas semanas y meses. Una de las únicas cosas que sabemos con certeza es que va a ver una nueva normalidad, y posiblemente será muy diferente a la que estábamos acostumbrados semanas atrás.
Este viernes, el primer día después de la conferencia retrasada, intentaremos actuar con normalidad. Tendremos una conferencia online de la Junta, seguida de una reunión de socios.
Con suerte, tendremos tiempo para hablar sobre las decisiones que esta tomando cada uno para lidiar esta crisis, pero al mismo tiempo estamos planeando una serie de mesas redondas virtuales para compartir puntos de vista y prácticas posibles durante las próximas semanas.
Se han completado espectaculares transacciones en el primer trimestre (IMAP), y hablando con varios socios de IMAP, parece ser que aquellas transacciones avanzadas se siguen cerrando. Pero aquellas en curso y nuevos mandatos están en espera, y las compañías están en el proceso de decidir cómo organizarse durante el próximo periodo, por mucho tiempo que pueda tomarles. Todavía hay una sensación de optimismo – no importa como cambien las cosas, nuestro expertise en el trato y profesionalidad serán más necesarias que nunca.
Una de las cosas que nos está enseñando esta crisis es que no importa de donde seas, no importa tu nivel de actividad económica o riqueza, todos estamos interconectados, enfrentándonos a los mismos problemas y preocupaciones. Ni los virus, ni los shocks económicos (ni los terremotos) reconocen las fronteras. Puede ser que tengamos que hacer frente a momentos difíciles, pero si permanecemos juntos, respetamos y nos ayudamos mutuamente, seremos más fuertes cuando todo esto haya acabado. Esto es otra cosa que puedo predecir con certeza.
Finalmente, pensemos conjuntamente en aquellos que estén enfermos, o tengan seres queridos o amigos infectados o hayan fallecido, aquellos que han perdido sus trabajos o están a punto de perderlos, a nuestros heroicos trabajadores de hospitales, a los investigadores que frenéticamente están buscando una vacuna y cura para los efectos del virus, para los trabajadores públicos que están luchando contra problemas muy por encima de cualquier cosa a la que se hayan enfrentado con anterioridad, y a todos aquellos cuyas vidas hayan volcado de una manera o de otra. Reza por todos ellos a tu manera.
Manténte a salvo, en contacto, y usa tu tiempo productivamente, haznos saber directamente qué más podríamos estar haciendo, y cómo nos deberíamos de estar preparando para este mundo cambiado.
Jurgis
25 de marzo de 2020